El acuerdo de contribución mutua fue ratificado por el presidente de la comunidad “Pascual Pocol”, David Milla y el Rector de la Universidad, Doctor Juan Cancino.
Un completo y amplio acuerdo de colaboración es el que firmó la Universidad Católica de la Santísima Concepción, personificada por su Rector, Dr. Juan Cancino, y la comunidad mapuche “Pascual Pocol” de Peleco, representada por su presidente David Milla Pereira.
El lugar elegido para la confirmación del convenio fue el Centro de Innovación y Transferencia Tecnológica (CITTA) de la UCSC, ubicado precisamente en el sector de Peleco, en la comuna de Cañete. Hasta dicho lugar, emplazado junto al Lago Lanalhue, llegaron también algunas de las 96 familias de “Pascual Pocol”, además de autoridades de la zona como el alcalde cañetino, Abraham Silva, el Director del CITTA, Eduardo Jeria y la Vicerrectora de Vinculación con la Sociedad de la UCSC, Carolina Piderit.
Entre los compromisos alcanzados se estipula que la Universidad entregará apoyo técnico en la formulación de programas o proyectos comunitarios, relacionadas con turismo, agricultura, ganadería, cultura y otros que sean de interés; apoyo en procesos de postulación a fuentes de financiamiento y ejecución y supervisión de programas o proyectos operados con recursos financieros de terceros, entre otros.
En tanto que ambas partes, “se comprometen a realizar gestiones pertinentes, ante sus respectivas instituciones con el fin de asegurar financiamiento de las actividades de desarrollo comunitario”.
Juan Cancino valoró el acuerdo alcanzado, asegurando que “nos abre las puertas para llegar a ser notables como lo declaramos en nuestra planificación estratégica, notables en cuanto al desarrollo local”. El Rector de la UCSC comentó que “es una alegría que los vecinos de este predio (CITTA) hayan abierto sus puertas para trabajar en conjunto” y dijo esperar que “toda la Universidad vea aquí una oportunidad y pongamos a disposición de estas 96 familias los distintos saberes que la universidad cultiva”.
Por su parte, David Milla ve con buenos ojos el potencial desarrollo que el convenio significa para su comunidad, el que será aprovechado para el cultivo de diferentes especies como legumbres, papas y otros. “Detrás de cada uno de nosotros hay una familia que necesita el espacio que se nos da acá, ya que en general se le cierran las puertas a las comunidades mapuche”, aseguró el líder mapuche.
Como cierre de la actividad, miembros de la comunidad beneficiada y representantes de la Universidad participaron de un rogativa, ceremonia típica mapuche en la que se hace una acto de petición de buen devenir ante un canelo, árbol sagrado del pueblo originario.
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