En entrevista con Diario El Sur, Christian Schmitz resaltó hitos de su gestión como la reacreditación institucional y el PDE, así como también se refirió a los desafíos que vienen para este año.
En conversación con Diario El Sur, el Rector de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Christian Schmitz, habló de los detalles de su primer año como principal autoridad de la UCSC. Entre ellos, el Rector destacó «el proceso de acreditación institucional, la formulación de un nuevo Plan de Desarrollo Estratégico y la celebración de los 25 años de nuestra casa de estudios».
Schmitz resaltó también que se recuperó la acreditación de vinculación con el medio y que fue «una grata noticia confirmar los cuatro años con las áreas de Gestión Institucional, Docencia de Pregrado y Vinculación con el Medio».
El Rector también se refirió a los futuros desafíos que enfrentará la Casa de Estudios, asegurando que como administración irán en búsqueda de «cimentar las bases para consolidar la investigación al interior de la universidad de manera estructural, lo que puede implicar la creación de una vicerrectona y fijación de incentivos para la productividad de la investigación; establecer bases para un mejor posicionamiento más allá de las fronteras de la Región y en determinados temas, la innovación y emprendimiento como un ejercicio para los estudiantes, y un tercer hito, vinculado a la internacionalización de la educación».
Pero no solo habló de su administración, sino que también se refirió a hechos coyunturales, como la reforma a la educación superior y las divisiones que su discusión ha generado entre los rectores de las diferentes universidades del G9. Schmitz dijo haber celebrado «la apertura de la presidenta (Michelle Bachelet) para recibir a los rectores y escucharlos, ya que en todo el contexto de la reforma no debemos olvidar que fue ella, a través de su programa político, quien propuso reformar el sistema de educación superior».
Schmitz dijo además estar de acuerdo con que el proyecto de reforma se divida asegurando que él mismo había comentado en marzo de 2016 a la Ministra de Educación, Adriana Delpiano «que el proyecto es de una complejidad muy alta» y que «ameritaba que frente a este tema se discuta de manera fragmentada».
Por último, reinvidicó su posición, como miembro del G9, de no abandonar el Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas y que se debía dar una instancia de encuentro, la que no ha exisitido aún. Al respecto, Schmitz declaró que «la política de la silla vacía, para mí, no soluciona problemas. Las diferencias dentro del Cruch se resuelven al interior, no ventilando las diferencias por la prensa».
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