
En la Misa por el 19° aniversario de la Universidad, el Gran Canciller reconoció el rápido crecimiento que ha tenido esta Casa de Estudios, así como también el trabajo que ha realizado tras el terremoto y el maremoto de febrero pasado.
La Universidad Católica de la Santísima Concepción hoy celebró su 19° aniversario con la Misa Oficial que presidió Monseñor Ricardo Ezzati, Gran Canciller UCSC y Arzobispo de Concepción, en la Parroquia San José, en Concepción. Hasta allí acudieron las autoridades universitarias, representantes del mundo público y privado, académicos, administrativos y estudiantes.
En su homilía, Monseñor destacó el crecimiento que ha experimentado la Universidad desde su creación, el cual ha derivado en la madurez de talentos que hoy se ponen al servicio de la región tras la catástrofe.
“El Señor nos ha permitido pensar y trabajar para quienes han sufrido más, poner las mejores energías espirituales, técnicas y evangélicas de nuestra institución al servicio de la comunidad. Han nacido muchas iniciativas, se ha podido levantar la bandera de la solidaridad con becas para los estudiantes (…), profesores y estudiantes han compartido la vida y el sufrimiento de tanta gente y levantado lo que había caído. Hemos visto a mujeres, niños y adultos que necesitaban de una mano amiga y que la encontraron en los miembros de nuestra comunidad”, subrayó.
Al respecto, agradeció a Dios que en la comunidad universitaria no se registraran víctimas fatales así como tampoco daños mayores en la infraestructura de nuestra Casa de Estudios.
El Gran Canciller también reconoció la alegría de la Universidad al contar con la confianza de centenares de jóvenes que, con sus familias, han creído en el proyecto original de la UCSC.
Monseñor Ezzati precisó que esta Universidad se distingue de otros centros por su identidad, su visión y su estilo de vida fundados en la fe. “Por eso un nuevo aniversario es una ocasión propicia para reafirmar su identidad y medirnos con el corazón de la Iglesia (…) De allí nace la Universidad, no puede perder de vista esta característica fundamental de su identidad”.