Académica Ainoa Marzábal impulsa investigación financiada por Fondecyt.
Académica Ainoa Marzábal impulsa investigación financiada por Fondecyt.
Que los estudiantes aprendan a pensar como científicos es el objetivo de una investigación que la académica del Departamento de Didáctica de la Facultad de Educación UCSC, Ainoa Marzábal, desarrolla en siete establecimientos educacionales de Concepción, Chiguayante y Talcahuano, específicamente en séptimo y octavo años.
La iniciativa toma como base el ajuste curricular que, desde 2009, propone un nuevo enfoque en la enseñanza de las ciencias, donde además de los contenidos tradicionales se trabaja en habilidades de pensamiento científico. Ese modelo teórico es el que este proyecto pretende validar en los colegios, llevándolo a las actividades de aula.
El denominado Fondecyt de Iniciación, que en 2011 financió el proyecto con 30 millones de pesos, beneficia a académicos bajo los 40 años de edad y con menos de cinco años de haber obtenido un doctorado. En el caso de Marzábal, este posgrado es en Didáctica en Ciencias Experimentales por la Universidad Autónoma de Barcelona.
La investigación, que se extenderá por tres años, se encuentra en su primera etapa, que consiste en capacitación a los profesores a través de seminarios de reflexión docente, realizados en la Facultad de Educación; la segunda apunta al desarrollo de los estudiantes a partir de las propuestas entregadas en la fase anterior; y la tercera a análisis y difusión de los resultados obtenidos.
En este trabajo los docentes consumen innovación y luego la generan, compartiendo el conocimiento, por ejemplo, a través de publicaciones. “A largo plazo el colegio sale ganando, porque tiene a un profesor que ha mejorado su práctica”, señaló la Dra. Marzábal.
Interesante fue la primera actividad de la etapa inicial, en que los escolares discutieron acerca de cómo afectaría una escasez de agua en el planeta, observaron el vídeo “2070, un mundo sin agua” y escribieron una carta para convencer a otros sobre la utilización responsable de este recurso.
“Destaco el espacio que se le da a los docentes de compartir experiencias, el trabajo que realizan, el análisis crítico de su propia práctica y la producción de material en conjunto. Han demostrado gran compromiso”, expresó la académica.
La profesora de Ciencias Naturales del Colegio San Agustín de Concepción, Carla Cabezas, valoró la iniciativa. “Es importante porque nos permite mantenernos en capacitación, nos da la instancia para renovarnos día a día, actualizar las herramientas pedagógicas en la didáctica de las ciencias”. Agregó que, con este modelo teórico, “podemos utilizar las habilidades de pensamiento, apropiarnos de ese mecanismo de trabajo, y los estudiantes desarrollan sus capacidades de análisis, de reflexión, es decir, las habilidades cognitivas van asociadas con el conocimiento”.