Rector Christian Schmitz consideró precaria la posición de suspender la gratuidad a los estudiantes que se atrasan y luego estudian más allá de la duración de las carreras.
La pérdida de gratuidad por parte de 27 mil estudiantes de educación superior en todo el país, con un total de 3.610 en la Región del Biobío, perjudica con el cese del beneficio a quienes cumplieron con la duración formal de su carrera, pero aún no la terminan. En este contexto, el Ministerio de Educación informó que la solución para estas personas es que el 50% del arancel lo costeen las casas de estudios y la otra mitad por alumnos, con un periodo de gracia que no excede los dos semestres.
El Rector de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Christian Schmitz, explicó que la Universidad ya ha tomado contacto con cada uno de los alumnos para conocerla detalles de esta situación: “Nos parece tremendamente injusto, como Universidad, pero también nos parece precaria la posición de suspender la gratuidad a los alumnos que se atrasan y luego, estudian más allá de la duración de las carreras. Esto afecta a cerca de mil alumnos que quedan en una situación desvalida. Muchas veces sabemos que son los estudiantes más vulnerables, en términos socioeconómicos, a quienes se les quita la oportunidad de acceder a formación”.
Sobre el perfil de estos casos, la autoridad explicó que algunos de ellos son sensibles, “ya que son estudiantes que son primera generación y esperanza de sus familias que van a la universidad, e incluso trabajan al mismo tiempo. Lo hacen para tener el sustento y ayudar a su familia; aquí no sólo se suspende la gratuidad y se genera un impacto en la universidad, sino que sería interesante ver cuántos estudiantes de estos congelarán sus estudios tras quedar sin gratuidad”.
Respecto a las soluciones, el Rector señala que la política de gratuidad entrega el beneficio por los años de duración de su carrera, considerando el año en que se entrega el beneficio. Para un alumno de Tercer Año en una carrera que dura 10 semestres, el beneficio se extenderá por los seis semestres que le restan para terminar su formación: “Para nosotros es volver hacia el pasado. Tenemos que brindar créditos o becas no solamente externas, sino que estamos evaluando reactivar becas internas, pero las necesidades son mayores que los recursos. Hacemos un llamado a las autoridades ministeriales para que se aborde esta situación, y antes de extender la gratuidad a otros deciles, pensar en atender a los más desvalidos y ayudar a familias con necesidades”, indicó.