Monseñor Fernando Chomali realizó una charla junto a la Vicaría del Adulto Mayor, el apoyo del Instituto de Teología de la UCSC y una estudiante de Periodismo de la Universidad.

Monseñor Fernando Chomali realizó una charla junto a la Vicaría del Adulto Mayor, el apoyo del Instituto de Teología de la UCSC y una estudiante de Periodismo de la Universidad.
¿Qué haría ud. durante treinta años de su vida en que no trabajará? Esa es aproximadamente la proyección que se puede trazar para una persona tras su jubilación de la vida laboral, con las actuales cifras del envejecimiento de la población chilena. La situación de los adultos mayores que viven ese periodo fue el tema central de una conferencia del Arzobispado de Concepción, efectuada este viernes en el Aula Magna.
La actividad contó con el apoyo del Instituto de Teología de la UCSC, y se inició con la intervención del sacerdote y académico de esa unidad, Boris Santana, quien se refirió a la situación de los adultos mayores desde la perspectiva del evangelio.
Posteriormente, el Arzobispo y Gran Canciller de la UCSC, Monseñor Fernando Chomali, dictó la charla “En qué están los adultos mayores y porqué?, pregunta que fue respondiendo en su intervención, a través de cifras que recopiló con el apoyo de la estudiante de Periodismo de la UCSC, Belén Muñoz.
Chomali detalló que el cambio que ha sufrido la sociedad, donde se registran cada año menos matrimonios, más hogares monoparentales, más personas que viven solas, mayores expectativas de vida y menor cantidad de nacimientos, ha hecho que la situación del adulto mayor no solo cobre mayor importancia, sino también la necesidad de asumirla como parte de las políticas públicas.
Chile, señaló, es el segundo país con mayor envejecimiento de su población en la región, y al año 2025 se estima que existirá la misma proporción de adultos mayores y de niños entre 0 y 15 años, para luego continuar hacia una mayor proporción de ancianos. “Este aumento es un suicidio social, es un llamado a la extinción”.
“El gran drama será la sociedad, y ese será el gran desafío de las políticas públicas” expresó, describiendo algunas de las propuestas que ya ha hecho la OECD, donde se declara que la educación es uno de los factores que disminuye el nivel de dependencia.