Expertos neozelandeses expusieron sobre riesgo sísmico y rehabilitación de estructuras

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Los especialistas señalaron que la ley neocelandesa  define que cuando existe un edificio susceptible a los terremotos, el gobierno local define, inmediatamente,  que éste sea reforzado o demolido, dentro de un marco determinado de tiempo.
Los especialistas señalaron que la ley neozelandesa menciona que cuando existe un edificio susceptible a los terremotos, el gobierno local define, inmediatamente, que éste sea reforzado o demolido, dentro de un marco determinado de tiempo.

Los investigadores participaron en el contexto del  Taller para la Reconstrucción Regional, organizado por el Centro de Investigación Marítimo Portuario (CIMP) y el Departamento de Ingeniería Civil de la UC penquista.

Un equipo de expertos de la Asociación de Ingeniería Sísmica de Nueva Zelanda (NZSEE) fue el encargado de exponer su experiencia y conocimiento en el Tercer Taller para la Reconstrucción Regional, organizado por el Departamento de Ingeniería Civil de la UCSC. La actividad  se desarrolló en el Auditorio San Agustín, de la  Facultad de Ingeniería de nuestra Casa de Estudios.

La misión neozelandesa  conformada por 15 profesionales de distintas áreas, entre los que figuraba el académico de la  Facultad de Ingeniería Claudio Oyarzo,  reunió a especialistas en ingeniería en estructura, manejo de desastres, sismología, geología, redes de servicios básicos, manejo de sustancias peligrosas y geotecnia.

El expositor Graeme Lawrence, consejero del Department of Building & Housing del Ministerio de Vivienda de Nueva Zelanda, se refirió a las normas y códigos de edificación en su país. En este ámbito, detalló que el sistema normativo está basado en el desempeño. Asimismo, mencionó que el código de edificación, incluido en estas normas, contiene 35 cláusulas con los requerimientos específicos en todas las disciplinas, como estructuras, durabilidad, incendios, humedad, etc.

Antes de construir en Nueva Zelanda, se requiere contar con un permiso del gobierno local. “Para edificios de varios pisos, se emite una autorización especial, ya que se establece un programa de cumplimiento más específico y regulado sobre cómo deben construirse estos edificios” detalló el especialista.

La industria –agregó-, provee de pautas de construcción según sea necesario. “Esto requiere de trabajar en conjunto con centros de investigación para obtener los datos técnicos adecuados a la edificación. La transferencia de este conocimiento a la industria es generalmente a través de consejeros de inmobiliarias” señaló Lawrence.

Por su parte, Graeme Beattie, Ingeniero Estructural Senior de la Consultora BRANZ, hizo hincapié en los materiales constructivos y las investigaciones sobre su resistencia, con el fin de hacer construcciones de buena calidad y no tener que llegar a demolerlas, como señala la Ley para edificios susceptibles a terremotos. Ejemplificó con distintos edificios que han sido objeto de investigación para aplicar técnicas de mejoramiento.

A su juicio, lo que ellos vieron en Concepción es que se ha cumplido en general el objetivo de que los edificios no colapsen y que las personas puedan salir en pie desde su interior.

En tanto, la Arquitecto y experta en Planificación Urbana de la U. de Victoria (Wellington), Penny Allan, destacó que la capital penquista, en su estructura “es una ciudad muy resiliente”. La experta se refirió principalmente al rol de los espacios abiertos en la recuperación tras el terremoto, y explicó lo que significa la resiliencia de las estructuras.

“La resiliencia es la capacidad para resolver la interrupción y reorganizarse durante un cambio, logrando recuperar la misma función, estructura e identidad que se tenía en el pasado” detalló. Un sistema resiliente cambia y vuelve al mismo nivel, y este principio fue ejemplificado por la arquitecta. “Los espacios abiertos son los que tienen la capacidad para poder absorber los impactos (…) y permiten la adaptación de la ciudad a los cambios”. Así, en tiempos de crisis, estos espacios se transforman en una segunda ciudad o pequeñas comunidades donde se efectúan diversos servicios.