Proyecto sobre capacitación para personal de reacción ante catástrofes se posiciona como un candidato para ganar “Desafío Aulab”.
Una idea que busca conectar los problemas del país con el pensamiento e ideas de instituciones de Educación Superior, es uno de los objetivos que tiene el concurso “Desafío Aulab”, iniciativa impulsada por el Ministerio del Interior, a través de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi). Instancia en la que grupos de estudiantes de diferentes Universidades presentan proyectos para mejorar algún aspecto relevante frente a una catástrofe, en las siguientes categorías: Vivienda, Datos y Reacción.
Motivo de lo anterior, es que Erick Flores, Juan Ruai y Cristóbal Salamanca, estudiantes de Ingeniería Civil de la UCSC y Alejandro Pedreros de la Universidad de Concepción, formularon el proyecto “Plan de Evaluación Estructural en Catástrofes” (Plevec), en la categoría de “Reacción”, donde plantean la capacitación de personal para la evaluación de daños en las viviendas. Idea que fue elegida entre 54 iniciativas similares y que se encuentra en la última etapa del concurso, en la que deben perfeccionar el Plevec.
Además, se busca implementar un sistema expedito del levantamiento de información sobre daños estructurales, de modo que se incorpore una aplicación que permita tener online los datos recogidos en las encuestas, o que estos resultados se agreguen en una tarjeta de memoria en caso de no contar con un servidor de Internet. Así, existirá una idea de los lugares más dañados, concentrando allí los esfuerzos de las autoridades de Gobierno.
Claudio Oyarzo, académico de la Facultad de Ingeniería y tutor del grupo de estudiantes, comentó que “los alumnos idearon un sistema completo de reacción, ya que actualmente las personas que realizan el trabajo de recolectar información no se encuentran preparados, porque muchas veces no tienen el conocimiento necesario sobre el área”.
Oyarzo agregó que la capacitación para las personas que realicen esta labor, consistiría en entregar perfeccionarlos en el área legal, primeros auxilios, daños y seguridad. “Necesitamos estandarizar el procedimiento de quienes finalmente entregar la información a los estamentos de ayuda”, explicó Oyarzo.
En tanto, Erick Flores, uno de los participantes, indicó que “esto es algo nuevo porque nunca habíamos concursado en algo similar, y ha sido una experiencia única, ya que hemos conocido grupos de diferentes parte del país con distintas realidades. Nuestro proyecto fue ideado por las falencias que hay en las personas que realizan la recolección de información y para optimizar el tiempo de reacción en las 72 horas después de una catástrofe”.
El grupo de estudiantes deberá presentar sus avances el próximo 5 de febrero, y, luego de realizar las correcciones y observaciones por parte del jurado, deberán participar de la feria final que se realizará en la Plaza Ciudadanía el próximo 30 y 31 de marzo. Los premios para los primeros lugares de las categorías, considera 120 millones de pesos, que deberá ser repartidos entre los tres grupos.