Trabajo en terreno los aproximó a lo que será su futuro amplio profesional.

Trabajo en terreno los aproximó a lo que será su futuro amplio profesional.
Los futuros bibliotecarios documentalistas de la UCSC no pierden el tiempo. Además de repartir la jornada entre clases y estudios, su carrera se preocupa de que realicen visitas a terreno capaces de aproximarlos a lo que será su profesión. En ese contexto, ya han visitado las bibliotecas de la Universidad de Concepción y la Universidad del Bío-Bío. Cuál no sería su sorpresa cuando los responsables de ambas instituciones les confesaron derechamente que los necesitaban con urgencia, título en mano.
“La verdad es que en ambos casos ocurrió lo mismo: no existe personal profesional de recambio. Esa realidad es recurrente en las bibliotecas chilenas pues, si cuentan con algún bibliotecario, cuando esa persona deje de trabajar la vacante quedaría desierta”, comenta el académico del plan de estudios Rodrigo Soto, quien guió a los alumnos en las visitas realizadas a las dos Casas de Estudios locales.
Rodrigo Soto también explica que la situación actual de las bibliotecas -sean estas universitarias o de cualquier otra clase formal- es compleja en Chile, dado que si bien requieren de profesionales que se hagan responsables de la administración, selección y clasificación de material, en el país no existe una profesionalización amplia de la especialidad. “La única alternativa que existe de momento es ofrecer una mejor remuneración a bibliotecarios profesionales de otras instituciones”, lamenta el académico.
Son sólo tres las universidades pertenecientes al Consejo de Rectores que imparten la carrera, a la que se suma una institución privada que ofrece el plan de manera regular y otra de la misma naturaleza, pero que lo imparte como programa especial. Las otras dos opciones nacionales corresponden a planes de postgrado, según lo detalla el Colegio de Bibliotecarios de Chile en su sitio de Internet.