Programa de actividades también incluye iniciativas destinadas a fortalecer el compañerismo entre los deportistas y su vínculo con la Institución.
Adaptarse a los espacios e implementos de que dispone cada deportista, así como a las dificultades técnicas han sido algunos de los desafíos que ha debido enfrentar la Unidad de Deportes y Recreación de la UCSC al momento de continuar, en medio de la crisis sanitaria que afecta al país, con los entrenamientos de las selecciones deportivas universitarias.
“Cuando se presentó la pandemia tuvimos que adecuarnos y responder rápido. No nos demoramos mucho tiempo en lograr que nuestros deportistas estuvieran activos. Es así como elaboramos rutinas de entrenamiento que enviamos por los Whatsapp de las distintas selecciones. Luego, comenzamos a juntarnos por videoconferencia. La primera plataforma que utilizamos fue Meet y después Zoom a través de las cuentas de los profesores. Con posterioridad, la Universidad nos entregó una cuenta que es la que utilizamos para reunirnos y entrenar”, explicó el coordinador de las Selecciones, Julio Orellana.
El también entrenador de la rama de vóleibol varones agregó que, en gran medida, tienen grupos armados de selección, la mayoría de ellos con al menos 15 integrantes. “Estamos cercanos a los 150 deportistas activos que están participando de nuestros entrenamientos. Contamos con un gran número de estudiantes cautivos, que están ansiosos y a la expectativa de que esto pase, y puedan retomar lo que a ellos les gusta que es el entrenamiento y la competencia”.
De este modo, las disciplinas que se mantienen funcionando, tanto en su rama femenina como masculina, son: fútbol, básquetbol, balonmano, vóleibol y tenis de mesa. Para ello se cuenta con un calendario semanal con dos entrenamientos designados, al menos, para cada una.
“No ha sido fácil, porque los estudiantes practican un deporte. Nosotros les hemos entregado entrenamiento físico con tendencia de movimientos técnicos. La respuesta ha sido muy buena, saben que deben estar en condiciones para el retorno presencial y para poder competir”, sostuvo Orellana.
Asimismo, comentó que también se invitaba a los estudiantes a reuniones y charlas en las que los mismos jóvenes abordaban materias relacionadas con sus carreras, con el objetivo de que estos se sientan acompañados y protagonistas. “Vamos buscando alternativas de tareas que aporten al grupo y le permitan a este sentirse vinculado y continuar trabajando”.
Por su parte, la entrenadora de vóleibol Damas, Andrea Donoso, destacó la perseverancia de las deportistas a pesar de las dificultades presentadas durante esta pandemia. “Se organizan para estar y cumplir con su compromiso por ellas y el equipo. Sabemos que ser, a la vez, deportista y estudiante es cómo llevar dos carreras a la par. Hay que rendir en lo académico y en lo deportivo, por tanto, la misión es doble y requiere de una muy buena organización”. La profesional también señaló que las jóvenes agradecen el que la Universidad mantenga este vínculo con sus selecciones deportivas, ya que no todas las casas de estudio lo hicieron, y consideran muy positivo tener la oportunidad de seguir entrenando.
Sobre el trabajo realizado en el actual contexto, la estudiante de Periodismo, Consuelo Cabrera, recalcó la perseverancia y disciplina que debe tener un deportista frente a las adversidades que se puedan ir presentando en su camino. “En un comienzo me desmotivé, pero tenían que primar mi mentalidad, así como mis objetivos y metas a futuro. También he podido valorar situaciones como compartir en cancha con mis compañeras y profesores, el roce social que se gestaba. El día de mañana, ello tendrá un sabor distinto que aprovecharé en todo momento”.
De igual modo, la deportista sostuvo que los entrenamientos gestaron un equilibrio emocional ante la situación de pandemia. En relación con la importancia de contribuir a la salud física y mental de los estudiantes, el coordinador de Selecciones comentó que se ha brindado apoyo a quienes se han visto afectados por el virus, buscando formas de comunicación para generar confianza y cercanía por parte de los profesores y compañeros. “Los deportistas se han sentido acompañados por nosotros y por la Universidad, porque siguen vinculados a la Institución, independiente de que no estén en ella presencialmente.”