Tema complejo el que abordó la Brigada de Homicidios para instruir a alumnos de la carrera.
Tema complejo el que abordó la Brigada de Homicidios para instruir a alumnos de la carrera.
“La maté porque era mía” no es una excusa que valga, pero aún así forma parte del repertorio del femicida. Se trata de agresores tan cuerdos como cualquiera, en el 80% de los casos, pero que abusan de la vulnerabilidad de sus parejas en la intimidad del hogar, a través de un círculo vicioso marcado por la violencia verbal, sicológica y, por supuesto física.
Así lo detallaron los inspectores Jorge González Erwin Cea, de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones, expositores de la segunda jornada de los I Coloquios de Trabajo Social, desarrollados en un repleto Auditorio Santa Teresa de Jesús de Ávila de la Facultad de Comunicación, Historia y Ciencias Sociales. A partir del título “Femicidio en la Región: problema social y estrategias para su prevención”, los estudiantes de la carrera recibieron una completa inducción en relación a una temática sensible y de pleno interés para su especialidad.
“Nosotros sí podemos hacer algo al respecto”, aseguró a los estudiantes el Jefe de Carrera (s) Alejandro Abarca, quien también formó parte del panel de expositores. El académico detalló a grandes rasgos cómo el trabajador social es capaz de colaborar para intentar solucionar la problemática de la violencia intrafamiliar a través de intervenciones determinadas, directamente relacionadas con víctima y agresor.
Es que la antesala del femicidio es justamente un escenario cargado agresiones crecientes, que en Chile afecta con mayor especificidad a mujeres de entre 26 y 48 años, sin recursos propios, casadas o en convivencia con sus parejas y con historias familiares vinculadas al fracaso. “El maltrato las conduce a un estado de indefensión tal que, en algún minuto, desemboca en un crimen”, explicó el Inspector Jorge González, de la BH.
Frente a esa triste situación es que puede colaborar el trabajador social quien, a partir de su preparación profesional, se hace partícipe del problema a través de intervenciones dirigidas, las mismas que los estudiantes de la carrera aprenderán a manejar gracias a los conocimientos aprendidos en el aula y su aplicación práctica en la Región del Biobío.