Gabriel Pozo, docente de Educación, y tres alumnas de Pedagogía en Educación Básica, participaron en el Primer Congreso Internacional de Niñez y Políticas Públicas, organizado por la U. de Chile.

Estudiantes y académico de Educación expusieron «El PAC y sus contradicciones. ¿Apoyo para mejorar resultados de aprendizaje o limitantes del proceso de socialización?».
Gabriel Pozo, docente de Educación, y tres alumnas de Pedagogía en Educación Básica, participaron en el Primer Congreso Internacional de Niñez y Políticas Públicas, organizado por la U. de Chile.
«El PAC y sus contradicciones. ¿Apoyo para mejorar resultados de aprendizaje o limitantes del proceso de socialización?» se denominó la ponencia que el académico de la Facultad de Educación, Gabriel Pozo, y las estudiantes de Pedagogía en Educación Básica, María Lorenza Carriaga, Luisa Cuevas y Damaris González, desarrollaron en el Primer Congreso Internacional de Niñez y Políticas Públicas, organizado en Santiago por la Universidad de Chile y ejecutado por la Universidad Central.
En el encuentro, Pozo y las alumnas propusieron las desventajas que presenta el Programa de Apoyo Compartido (PAC), estrategia de intervención del Ministerio de Educación que busca mejorar los resultados del Simce. “Sin embargo, gracias al estudio etnográfico desarrollado en tres escuelas de la Región del Biobío, se comprobó que el PAC, como política pública implementada para contextos vulnerables en vías de mejoramiento de la calidad de la educación, limita la creatividad docente e interfiere negativamente en el proceso de socialización escolar”, explicó el académico.
Agregó que “la ponencia marcó un importante referente en las dos jornadas que se extendió el Congreso, específicamente en el Grupo de Trabajo ‘Infancia y Escuela: procesos de socialización y políticas públicas’, coordinado por académicas de universidades de Brasil y Colombia, María Orofino, María Ospina, Laura Souza y Estela Scheinvar”.
Asimismo, el docente destacó que “las estudiantes no habían tenido la posibilidad de mostrar los resultados de sus investigaciones en una instancia formal e internacional de reflexión educativa, de cuya discusión conjunta se puede concluir que, para mejorar la calidad de la educación en Chile, se hace necesario repensar la intervención de la niñez temprana, generando nuevas alternativas de trabajo en la educación básica, donde lo central no sea la preparación mecánica para responder a pruebas estandarizadas, sino una educación basada en la interacción escuela-familia-comunidad, en que el docente sea un mediador afectivo al momento de implementar su misión socializadora”.