Casa de Estudios celebró junto a Conadi el cierre del convenio que benefició a 59 miembros de la Mesa Territorial de Peleco Huentelolén en el cultivo de vegetales y leguminosas.
Desarrollo sustentable y rescate de la identidad cultural de la zona fueron las bases del proyecto de fomento productivo que cerró exitosamente la Universidad Católica de la Santísima Concepción junto a Conadi, en beneficio de 59 miembros de la comunidad mapuche Pascual Pocol, en Cañete. La actividad se realizó en el Fundo Peleco de la UCSC y finalizó con la certificación de los participantes.
Papas, arvejas, porotos, ñocha y flores fueron parte de las especies que formaron parte de la capacitación y cultivo para los miembros de la Mesa Territorial Peleco Huentelolén, por parte del Centro de Innovación y Transferencia Técnico Agropecuaria (CITTA) de la Casa de Estudios.
“Nosotros firmamos un convenio días después de quemarse nuestras dependencias en Peleco, y hoy estamos viendo frutos del trabajo y compromiso asumido. Comprobamos que juntos podemos aportar al desarrollo de la zona, la región y el país”, señaló María Carolina Piderit, Vicerretora de Vinculación con la Sociedad de la UCSC.
El cultivo de especies y capacitación se realizó en los terrenos del Fundo Peleco, en el caso del rescate de variedades de papas, porotos y arvejas, mientras que la ñocha (fibra vegetal) y flores ,fue impartido y cultivado en predios de los mismos beneficiarios.
“Es un tremendo orgullo trabajar con 59 personas y sus familias, que reciben capacitación para mejorar la producción del territorio. Agradecer a la UCSC, que proporcionó los terrenos, firmamos un convenio en un momento complejo, pero hoy estrechamos lazos. Y es importante que se ha respetado mucho el conocimiento ancestral de las comunidades”, indicó Carlos Carvajal, director regional de Conadi.
Verónica Silva, directora de Extensión y Académica y Servicios de la Universidad, resaltó que “la importancia es que las personas y familias que participan puedan llevar eso a su práctica familiar y originar una forma de sustento, de autonomía financiera y generar emprendimientos. En algunos casos, formalizar lo que algunos ya están haciendo, como semilleros de papas, flores, ñocha o leguminosas”.
El proyecto tuvo como objeto fortalecer las capacidades productivas, técnicas y comerciales de la comunidad pascual Pocol, a través de actividades formativas, demostrativas y de implementación. Dentro de estas actividades, cabe destacar la implementación de invernaderos de flores, implementación de infraestructura para la producción de ñocha y el establecimiento de semilleros de papa y leguminosas.
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