Es increíble lo que está sucediendo en nuestro país con el boom de los centros comerciales. Según los datos entregados por un diario de circulación nacional, entre enero y septiembre de este año, 390 millones de personas visitaron estos locales, lo que equivale a que cada uno de los 17 millones de habitantes del país ingresó 23 veces durante dicho periodo. Más sorprendente aún es el número de visitas a septiembre, el cual es superior en un 6.5% del total del año anterior, y eso que falta evaluar el mes más visitado, diciembre.
Concepción no está ajeno a este escenario, basta con mirar el crecimiento del Mall, pasar por la costanera y observar frente al puente Llacolén o visitar la calle Castellón entre Barros y O´Higgins en donde nuevos centros comerciales se comienzan a erigir. Por lo anterior, no se visualiza crisis en el bolsillo de los consumidores, como tampoco en las empresas del retails, porque de lo contrario no estarían efectuando este tipo de inversiones. ¿Qué está sucediendo?
El problema principal radica en la sociedad que estamos viviendo, la que se encuentra centrada en la cultura del tener, que invade las prioridades del mundo consumista actual, dejando en otro plano las cosas realmente importante, como el compartir en casa los ricos almuerzo en familia, conversar con la esposa y los hijos, pasear por el parque, la playa, el campo o hacer cosas tan simples como ver un película en familia, leer un libro, etc. Es increíble como la vorágine del mundo actual nos ha llevado a este punto, al dinero plástico, la inmediatez, las cosas desechables, por lo tanto, debemos volver a lo simple, a la cultura del dar que nace del amor.
Iván Valenzuela Díaz
Decano Facultad de Ciencias Económicas
Universidad Católica de la Santísima Concepción
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