Aunque entre los objetivos principales del arte médico y disciplinas afines está resguardar la salud que sustenta a la vida biológica, y para eso nos formamos, no podemos soslayar el hecho de que nuestra formación, primero como personas de bien, y luego como profesionales de la salud, ocurre en una Universidad. Pero no en cualquier Universidad. Nos formamos en una Universidad Católica.
Este solo hecho impone que debemos alcanzar excelencia máxima, ya que nuestro concepto antropológico es que servimos a personas que sufren y les ayudamos a restablecer la salud de sus vidas, que les han sido otorgadas por Dios.
Pues bien, para alcanzar excelencia máxima y así servir a la comunidad, obviamente debemos tener un rendimiento académico óptimo. Pero también, y tanto o más importante, es lograr una realización plena como estudiante universitario, como parte de la ‘academia’ y del mundo que reflexiona, experimenta, descubre, aprende y hace ciencia… pero también hace historia.
Como jóvenes universitarios, no se puede desaprovechar la oportunidad única en vuestras vidas de hacer investigación y extensión, especialmente investigación científica, clínica o epidemiológica, vinculada a nuestra formación, pero a nuestra formación integral, como personas y como médicos.
Si no hacemos esto ahora, ya, ¿cuándo lo haremos?…
Nuestra Facultad de Medicina de la Universidad Católica de la Santísima Concepción pretende distinguirse por la excelencia, pero la excelencia no sólo de su formación, sino de las acciones que realiza y de la calidad profesional y humana de las personas que forma.
La excelencia la genera la acción de personas motivadas para lograr calidad. Y calidad, simplemente es el gusto por el trabajo bien hecho.
Nuestro trabajo académico como estudiantes sólo puede estar ‘bien hecho’ cuando nuestro desarrollo es pleno. No están aquí sólo para estudiar, rendir y aprobar. Esa, es una parte del tema, importante sin duda, pero inacabada si no cuenta con desarrollo paralelo de otras esferas de la vida.
Entre esas esferas, está la extensión académica, la extensión artística – cultural y la investigación.
La investigación es considerada en muchas partes como el principal, y a veces único, motivo de existencia de las Universidades. La investigación genera conocimiento y éste, aplicado, produce tecnología, es decir, progreso. Progreso, para nosotros, significa la posibilidad de salvar una vida o simplemente aliviar el sufrimiento de alguien.
Pero también significa el placer de aprender, la exquisita aventura de ser protagonista de la historia de la Ciencia, pero también de nuestra propia historia como profesionales.
En esta Facultad de Medicina, apoyamos a los estudiantes que desean vivir plenamente sus vidas universitarias. Apoyamos la investigación. Pero el primer apoyo y motivación, qué duda cabe, es el que nace en vuestro propio interés, en vuestro propio corazón.
La vida no siempre da segundas oportunidades, y sin duda los estudiantes de Educación Superior están en el mejor momento de sus vidas para potenciar su futuro ejercicio profesional y su formación integral con el desarrollo, participación y colaboración en la investigación, que es el alma y motor del mundo académico, y del Mundo.
Dr. Claudio Lermanda
Decano Facultad de Medicina
Universidad Católica de la Santísima Concepción