Texto tiene por propósito entregar a los estudiantes información y estrategias fácilmente aplicables, con las que puedan implementar medidas fundamentales para su bienestar síquico.
La importancia que implica ser conscientes de la salud mental y de lo que se puede hacer para mantenerla en forma adecuada motivó a la Unidad de Salud Estudiantil de la DAE a elaborar un segundo manual de Primeros Auxilios emocionales, está vez orientado al autocuidado en esta materia.
El objetivo del texto, al que se puede acceder en http://dae.ucsc.cl/, es proporcionar información y estrategias fácilmente aplicables en la vida diaria, que aporten en la construcción de una adecuada autoestima, relaciones sociales, rendimiento académico, entre otros, lo que puede a su vez disminuir el riesgo de deserción estudiantil.
“La salud mental es un concepto que está vinculado al autocuidado, el cual se mantiene con la práctica de actividades concretas que nos proporcionan un buen estado de salud y bienestar. Este tema cobra vital importancia en la población de jóvenes universitarios debido a la repercusión que tiene en su rendimiento académico y calidad de vida. En esta etapa los jóvenes pueden implementar medidas fundamentales para su bienestar”, sostuvo la sicóloga de la DAE, Lorena Rodríguez.
Es así como el manual les permitirá a los estudiantes detectar indicadores de riesgo de la salud mental, así como también los guiará para reconocer y gestionar el estrés diario. “Se seleccionaron estrategias que cuentan con evidencia científica sobre el impacto positivo en la restauración del organismo, en un aumento de la productividad y en el bienestar en general”, agregó la profesional.
Entre otras cosas, se dan a conocer las “pausas reconstituyentes”, que son acciones breves, momentos de descanso que pueden ser aplicadas individualmente o en la relación con otros y que se incorporan en la jornada diaria. Estas pausas, al ser implementadas en la vida diaria, favorecen el desempeño cognitivo y físico, es decir, potencian la energía, concentración, memoria, coordinación físicomotora, influyendo positivamente en el desempeño académico.
La sicóloga explicó que en la medida en que los estudiantes tengan conocimiento sobre estos temas, lograrán identificar aspectos que puedan estar afectando su calidad de vida y así realizar pequeños cambios que sirvan para revertir esta situación, sin tener que recurrir a un profesional. Por ello, se espera que sea el alumno el que active sus propios recursos de autoayuda en su salud mental.
“Este tipo de material favorece el que los jóvenes sean conscientes de los beneficios del autocuidado, y conozcan y practiquen acciones o estrategias fáciles, rápidas y efectivas para mantener su bienestar y calidad de vida, impactando positivamente en su vida académica. Son recursos o estrategias que les permiten hacerse responsables de su bienestar, así como también compartirlos con otros y, de este modo, favorecer una cultura estudiantil que fomente estilos de vida saludables y desmitifique el descanso o pausas como innecesarias o sinónimo de poca productividad. Está demostrado ampliamente en el mundo científico y en la dinámica laboral en países desarrollados cómo la implementación de estas acciones tiene un impacto, entre muchos otros beneficios, en el aumento de la productividad, desempeño y bienestar general”, concluyó Rodríguez.