El Vice Gran Canciller de nuestra Universidad, R.P. Luis Rifo, despidió y bendijo a los 44 estudiantes que finalizaron los últimos tres años de la carrera en el Hospital Clínico Herminda Martin, de Chillán, en una ceremonia realizada en la mañana del lunes 30 de noviembre en el auditorio de este centro asistencial.
Con una ceremonia de bendición, 44 jóvenes estudiantes de Medicina de nuestra Universidad finalizaron su crucial periodo de internado en el principal campo clínico de la UCSC, el Hospital Herminda Martin de Chillán. El Vice Gran Canciller, R.P: Luis Rifo, presidió este acto, efectuado el 30 de noviembre en el auditorio del centro hospitalario.
Junto a la autoridad universitaria estuvieron presentes el Secretario Académico de la Facultad de Medicina, Dr, Juan Francisco Stetcher, en representación del Decano, y el director del hospital, Dr. Rodrigo Avendaño, quienes despidieron con emotivos discursos a los futuros facultativos. Los acompañaron también la coordinadora y docente del Campo Clínico, Dra. María Aurora Cabello, quien condujo la ceremonia; algunos docentes médicos y funcionarios del Campo Clínico en Chillán.
Por elección de los alumnos, al médico Alfonso Lepe le correspondió pronunciar el discurso de despedida de sus profesores, quien reflexionó sobre esta profesión y sobre el perfil que se exige al médico, especialmente al egresado de la UCSC, que definió como un profesional que se debe desempeñar eficientemente, en especial en el nivel primario de salud, y que dé testimonio permanente de su formación cristiana en el ejercicio profesional.
El Secretario Académico de la Facultad, a su vez, entregó un saludo del Decano a los directivos, docentes y alumnos del hospital clínico y expresó que el primer desafío del estudio de la ciencia en nuestra Universidad es poner al hombre en el centro de la reflexión y del quehacer universitario. “Y no a cualquier hombre, sino al enfermo, al necesitado, al que sufre; el fin de nuestra Facultad es formar personas que conozcan profundamente al hombre y respeten su dignidad, que lo proteja desde la concepción hasta la muerte natural”.
“Aprendimos que ser médico es un estilo de vida”, dijo entre otros conceptos el ex alumno interno Aldo Sepúlveda, quien habló en representación de sus compañeros, momentos antes de la bendición impartida por el RP Luis Rifo. Posteriormente los futuros médicos fueron agasajados con bouquets de flores y un cóctel. Sobre esta etapa cumplida en el hospital clínico desde el 5º año de carrera, una de las alumnas destacadas de su promoción fue la penquista Mónica Rodríguez Ireland, quien dijo que fue muy “intensa pero bonita” y manifestó su complacencia de haber acompañado como alumna interna este año a la comisión nacional de acreditación y pares evaluadores que estuvieron en ese recinto de Chillán. “Fue bien importante y una bonita oportunidad que me sirvió para conocer a los profesionales que vinieron a cumplir este proceso”, señaló la joven.