Especialista de la Dirección de Gestión Estratégica entrega consejos para aprovechar mejor nuestro tiempo libre.
Estamos a pasos de terminar el año, y una queja constante es que no tenemos tiempo para realizar otro tipo de actividades que no sean las de trabajo y el hogar.
Primero debemos conocer el concepto de conciliar vida laboral, familiar y personal, que se refiere básicamente a hacer compatible las diferentes facetas que tenemos como persona; es decir el trabajo, la familia, y el tiempo personal.
Esto implica reorganizar los tiempos y establecer medidas que nos permitan desarrollarnos en esos ámbitos, como por ejemplo distribuir de manera más equitativa las tareas del hogar entre los diferentes miembros de la familia y mantener los equilibrios respecto a las horas destinadas al trabajo. En definitiva, introducir nuevos modelos de organización y de corresponsabilidad.
¿Por qué hacerlo? Porque ocupar el tiempo personal en deportes, lectura, cultura, recreación y otros, es siempre un beneficio para la salud mental de las personas.
La Organización Mundial de la Salud y la UNESCO han considerado el buen uso del tiempo libre “como un factor promotor del desarrollo de los grupos y pueblos”.
Sin embargo, por alguna razón nos cuesta mucho destinar tiempo para ello. La recreación es muchas veces catalogada como acción secundaria, y se realiza sólo en caso que “quede tiempo”, pero ese tiempo nunca está disponible.
Hay que cambiar el concepto de tiempo personal como tiempo libre y considerarlo como un tiempo productivo que aporta a la salud mental. Por lo mismo, invitamos a:
1° Planear tu tiempo personal, elaborando una lista de las cosas que te gusta hacer.
2° Postergar actividades que no generan un aporte, como por ejemplo ver televisión.
3° Realizar actividades que sean “nuevas para ti”, experiencias no conocidas que amplíen tu espacio de seguridad.
4° Ser voluntario en alguna causa, aprender un idioma, o una técnica determinada.
5° Involucrarnos en un pasatiempo
6° Potenciar nuestra espiritualidad