Académicos de la Universidad identifican como factores determinantes de esta problemática la facilidad de acceso a instrumentos financieros, el escaso hábito en el control de gastos y el desconocimiento de las sanciones.
De acuerdo a cifras entregadas por la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras de Chile, a 2016 más del 20 por ciento de los endeudados en el país corresponde a personas cuya edad no supera los 35 años. Una realidad que se ha transformado en una problemática social que cada año va al alza y que entre sus principales causas se encuentra el ingreso a la Educación Superior, además de la facilidad que hay para los jóvenes de acceder a distintos productos financieros, con escasos requisitos.
Así lo identifica el académico de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la UCSC, Cristian Guzmán, quien explica que entre los principales factores que fomentan el endeudamiento en los jóvenes se encuentra los bajos ingresos de las familias cuando los hijos optan por estudiar en la Educación Superior.
«Cada día es más accesible para los jóvenes tener tarjetas de crédito en las tiendas comerciales y, cuando están en cuarto o quinto año de una carrera universitaria, les ofrecen acceso a cuenta corriente, sin muchos trámites o análisis de capacidad de pago actual, comentó.
Para el académico, las características que definen a este grupo son que, al existir mayor facilidad para obtener acceso a productos financieros y contar con un bajo nivel de ingresos, quieren acceder al dinero de manera rápida. También indica que influye un bajo conocimiento de términos financieros que afectan estas decisiones, tales como tasas de interés, Carga Anual Equivalente (CAE), multas por no pago, costo de los créditos, entre otros.
Entre las recomendaciones que entrega Guzmán para evitar estos inconvenientes asegura que necesitamos mayor educación financiera, que los jóvenes busquen información de cómo funcionan los productos financieros y sobre todo de los costos que tiene no pagar en la fecha indicada o de cancelar solo el pago mínimo.
El docente del Departamento de Economía, agregó que en el momento en que un joven tiene considerables deudas, lo aconsejable es tratar de ordenar los pagos y tener disciplina respecto de ingresos y gastos, o pagos presentes y futuros.
Sanciones
Aunque no existen castigos específicos para los jóvenes que no cumplen con sus compromisos financieros, en términos generales existen riesgos legales específicos para quienes, sin importar la edad, actúan al margen del reglamento. Sin embargo, esta situación toca de cerca de quienes adquieren tarjetas con casas comerciales y entidades bancarias, sobre todo por primera vez y sin hábito de pago, público donde se encasillan los estudiantes universitarios.
El abogado Mauricio Ortiz, académico de Derecho Comercial en la Facultad de Derecho UCSC, señala el escenario que espera a quienes son víctimas de este endeudamiento, y que debe ser conocido para no incurrir faltas que desemboquen en un problema mayor.
Pueden ser objeto de un procedimiento judicial destinado al cobro forzado de la deuda, el cual incluye la interposición de una demanda en su contra y, eventualmente, el embargo de bienes, para el caso que no exista pago voluntario. Nótese que el embargo puede recaer en bienes que se encuentre en el lugar donde vive el deudor (aunque no sean de este), siendo el verdadero dueño el encargado de acreditar su dominio en el juicio, mediante las denominadas tercerías, explica Ortiz.
Otra consecuencia es que la deuda puede traer consigo, además, la inclusión del moroso en el Boletín Comercial, lo que, eventualmente, le podría imposibilitar acceder a créditos y a realizar otras operaciones financieras.