Estudiantes de Educación de Párvulos efectuaron una tarde de actividades con los niños para promover hábitos saludables a través de diversas dinámicas.

Estudiantes de Educación de Párvulos efectuaron una tarde de actividades con los niños para promover hábitos saludables a través de diversas dinámicas.
Poner en práctica los conocimientos aprendidos no solo es un aporte para la formación profesional, sino también una forma de iniciar el vínculo con el mundo laboral. El campus San Andrés fue el escenario para cumplir con esta acción, realizada por estudiantes de primer año de Educación de Párvulos, bajo la guía de la docente Ximena Espinosa, y un grupo de niños de la Sala Cuna y Jardín Infantil Mundo Cantaclaro.
En las salas y los jardines del Edificio Monseñor Ezzati, las futuras educadoras realizaron diversas dinámicas en el marco de la asignatura “Estilos de vida Saludable”, con el objetivo de desarrollar habilidades y competencias para diseñar y ejecutar experiencias para párvulos y relacionarse con los profesionales a cargo de la formación de párvulos. Talleres de creación de cuentos infantiles y adaptación de juegos a la temática de vida saludable, fueron parte de la preparación.
La docente señaló que la actividad tuvo muy buenos resultados. “Claramente con este tipo de experiencias que son muy significativas, logran un mayor compromiso dentro de su propio aprendizaje, las estudiantes se sienten motivadas, consolidan aprendizaje de contenidos conceptuales importantes que han tenido durante el semestre, van reforzando sus habilidades comunicativas tanto con pares, como con otros profesionales y con grupos de niños”.
“El rol de la Educadora de Párvulos en la formación de hábitos es fundamental, debemos recordar que ella trabaja en conjunto con la familia en estos primeros años, formando y reforzando hábitos imprescindibles para un buen desarrollo personal y social (…) desarrollando valores como la responsabilidad, la tolerancia, la solidaridad, el cuidado del medio ambiente” expresó la profesora Espinosa, detallando que los niños de 0 a 6 años son campo fértil para aprender sobre salud y estilos de vida saludable.