Actividad organizada por la sede Cañete, formó a los asistentes al curso en torno a la cosmovisión mapuche y el modelo médico aplicado por este pueblo ancestral.

Actividad organizada por la sede Cañete, formó a los asistentes al curso en torno a la cosmovisión mapuche y el modelo médico aplicado por este pueblo ancestral.
Cerca de una treintena de laicos y religiosas de distintas parroquias de la Vicaría de Arauco, se reunieron en la sede de Cañete de la UCSC, para recibir capacitación respecto al sistema médico mapuche y la relación entre esta cultura y la chilena, considerando sus diferencias como riquezas.
El objetivo de la jornada fue informar y sensibilizar a los presentes respecto a la medicina intercultural, aplicada particularmente en la población más vulnerable de la sociedad. En la actividad se invitó a prestar toda la ayuda, prevención y protección a los niños y niñas que constituyen el sector más desprotegido de la comunidad.
“Es esencial mantenernos vinculados con la pastoral de la provincia, para mantener y fortalecer un vínculo permanente con el objeto de aunar energías en torno a beneficiar a nuestra comunidad, es por ello que seguiremos repitiendo estas instancias de aprendizaje”, señaló Heidi Oppliger, Directora de la sede de Cañete de la UCSC.
El taller “Medicina Mapuche”, fue impartido por el médico traumatólogo Nelson Vergara, docente del Diplomado de Salud Intercultural dictado por esta Unidad Académica, quien destacó el modelo médico aplicado por este pueblo milenario y la importancia de relacionarse con la cultura mapuche de igual a igual, respetando y valorando esta cosmovisión.
“Cabe resaltar que la medicina mapuche es una nueva alternativa de sanación en todas las dimensiones del ser humano. Para ellos la persona es responsable de su entorno, existen leyes naturales y de vida, las que hay que respetar y cumplir. El ser humano es integral en su espíritu, intelecto, emociones y cuerpo físico”, señaló el especialista.
En la jornada de formación se dieron a conocer datos estadísticos respecto a la realidad de la salud en Chile en comparación con países desarrollados y subdesarrollados, enfatizando la inversión del Estado y las oportunidades que tenemos como sociedad, considerando la medicina intercultural como una opción de mejora.