Estudiantes de la carrera de Enfermería recibieron la bendición de sus piochas, símbolo que los distingue en su periodo de práctica clínica.
Estudiantes de la carrera de Enfermería recibieron la bendición de sus piochas, símbolo que los distingue en su periodo de práctica clínica.
Llevar una piocha de la institución no es sólo un orgullo, es también un compromiso. Con este mensaje del Padre Cecilio de Miguel, más de sesenta estudiantes de la carrera de enfermería recibieron la bendición de sus distintivos en las ceremonias efectuadas en la Capilla Santa María Reina del Campus San Andrés.
En presencia de académicos, estudiantes y familiares, la carrera efectuó los actos de investidura de los jóvenes de segundo año de la carrera que inician su periodo de acercamiento al mundo profesional, en las prácticas clínicas.
Durante la bendición, el Padre Cecilio de Miguel señaló que llevar el distintivo institucional es un compromiso de dejar testimonio de lo que es el sello de la Universidad en el mundo a través de sus profesionales, en su comportamiento y en su trato a los enfermos y a sus familias.
El sacerdote enfatizó que como miembros de la UC están llamados a dar mucho más que otras personas, y a estar al servicio de los otros, especialmente de los más vulnerables.