«Es necesario cerrar este lamentable espisodio», señaló la autoridad.
«Es necesario cerrar este lamentable espisodio», señaló la autoridad.
Poco más de una hora estuvo reunido el Rector de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Dr. Juan Cancino, con los cinco estudiantes sancionados por irrumpir violentamente la sala de clases mientras dictaba su cátedra de Historia Natural de Chile, hecho ocurrido el pasado 27 de septiembre en el marco del conflicto estudiantil.
En un diálogo franco y directo, el Rector les manifestó que la reunión buscaba dar por superado este lamentable hecho, el que a su juicio, violenta el espíritu de sana convivencia que debe existir al interior de la Universidad. «En mis 45 años de labor académica nunca fui impedido que ejercer la docencia como en aquella oportunidad, donde se utilizó la violencia y hasta la detonación de un artefacto de ruido para evitar que prosiguiera con mi cátedra. Independiente de aquél triste episodio, he querido conversar con los estudiantes para conocer sus reales motivaciones y dar vuelta la página», declaró.
Carla Arias, una de las estudiantes sancionadas y que participó de la reunión, valoró positivamente el encuentro y destacó la voluntad del Rector de querer cerrar este lamentable episodio del que fue víctima. «El Rector nos recibió muy bien, siempre estuvo dispuesto a escucharnos, hecho que agradezco profundamente», indicó la joven de Pedagogía en Educación Media en Lenguaje y Comunicación.
El Rector Cancino, reiteró que la UCSC siempre estará abierta al diálogo en la medida que éste se de en ambiente de respeto entre las partes, y no mediante el uso de la fuerza y la violencia. En este sentido, recordó que las autoridades del plantel se han reunido con los representantes de los Centros de Alumnos y recientemente con la Federación de Estudiantes.
Tras más de cinco meses de investigación, el fiscal a cargo del sumario de la UCSC, Enrique Silva, evacuó un informe que estableció sanciones para cinco estudiantes del plantel, las que fluctuaron entre los 15 días y un mes de suspensión de sus actividades académicas.