
La Capilla Santa María Reina estaba colmada de personas que llegaron a acompañar a los jóvenes en este simbólico acto.
La Facultad de Educación tiene instaurada la tradición de dar inicio a la etapa de prácticas pedagógicas de sus estudiantes a través de un simbólico acto: la bendición de piochas.
Al comenzar esta semana, cerca de 100 estudiantes novatos participaron en esta significativa actividad. Se trató de Educación de Párvulos y Pedagogía en Educación General Básica, las que efectuaron sus ceremonias en las liturgias oficiadas por el Director de Pastoral, Padre Cecilio de Miguel, este lunes y martes, respectivamente.
El sacerdote señaló que pedir la bendición de las piochas en el contexto de la Eucaristía “es el mejor momento, pues se está aún más cerca del Espíritu de Cristo”. A modo de mensaje para los jóvenes que tienen como vocación educar y formar a personas desde que son pequeños, el Padre Cecilio les recordó que “el testimonio de nuestra vida es el que avala todas las enseñanzas que queremos entregar”.
Los estudiantes de la Facultad de Educación, desde sus primeros años de carrera universitaria empiezan con el proceso de Prácticas Pedagógicas Progresivas, mediante un acercamiento e inserción gradual en el que será su futuro campo laboral.